Tan solo mes y medio atrás, el 15 de enero, puse en este mismo blog, un comentario relacionado con el terremoto de 7.0 grados que afectó a Haití y cómo esa situación me recordaba las palabras de Jesús registradas en los evangelios. Ese terremoto de Haití no fue único, sino que en los días sucesivos se siguió dando otros temblores de gran magnitud que prácticamente han destrozado al país.
En este caso me voy a referir al terremoto de 8.8 grados que sacudió al hermano país del sur de nuestro continente, Chile. Las últimas noticias que he podido leer en Internet sobre lo que ha sido este evento catastrófico, informan de cifras espeluznantes. En www.Perfil.com La Sra. Presidente de Chile Michelle Bachelet señala que el sismo del sábado fue el más potente de los últimos 50 años.
La cifra de muertos causados por el sismo de magnitud 8,8 que azotó Chile en la madrugada del sábado llegó a 708, aunque podría escalar a medida que llegan reportes desde pueblos que fueron demolidos o borrados del mapa por las olas.
Bachelet declaró el estado de sitio en las provincias del Maule y Bío-Bío, donde el sismo y los tsunamis demolieron casas, derrumbaron puentes y sumieron ciudades en el caos. Gran parte del centro histórico de Talca, ciudad de 180.000 habitantes a 250 kilómetros al sur de Santiago, estaba destruido.
En la ciudad de Concepción, una urbe de 670.000 habitantes, cientos de personas saquearon el domingo centros comerciales y supermercados. La policía utilizó gases lacrimógenos para repeler algunos saqueos.
"Yo busco comida, amigo, comida para mis hijos", dijo un hombre identificado como Pedro. Hombres, mujeres, ancianos y niños corrían del local comercial cargando leche, alimentos y hasta lavadoras.
"Yo busco comida, amigo, comida para mis hijos", dijo un hombre identificado como Pedro. Hombres, mujeres, ancianos y niños corrían del local comercial cargando leche, alimentos y hasta lavadoras.
Chile, sobre la intersección de dos placas geológicas, fue barrido en el pasado por otros terremotos. Muchos recuerdan el sismo de magnitud 9,6 que destrozó la ciudad de Valdivia en 1960, el mayor del que se tenga memoria en el mundo.
(Datos tomados de la página de Terra http://economia.terra.com.pe/noticias/noticia.aspx?idNoticia=201002282257_RTI_1267397832nN28205142)
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